Por: José Antonio Alcaraz Suárez
Julio Menchaca Salazar, gobernador de Hidalgo, reveló que en la entidad existe un registro de más de 500 millones de pesos derivados de laudos laborales en contra de municipios y órganos desconcentrados, una situación que calificó como “resultado de la indiferencia y apatía” de administraciones pasadas.
La declaración se da en el contexto del reciente embargo que sufrió el municipio de Singuilucan, donde un juez ordenó el congelamiento de cuentas bancarias y escrituras de inmuebles tras una demanda de 24 ex trabajadores, quienes reclaman el pago de 21 millones 408 mil pesos.
Menchaca Salazar reconoció que el gobierno estatal difícilmente puede respaldar directamente a los municipios para afrontar estas deudas; sin embargo, indicó que la Secretaría de Hacienda de Hidalgo busca esquemas de apoyo como adelanto de participaciones o negociaciones con los afectados para amortiguar el impacto financiero.
El mandatario lamentó que durante años las autoridades municipales hayan postergado la resolución de conflictos laborales, provocando que los montos se incrementaran exponencialmente, afectando tanto a los trabajadores como a las finanzas públicas.
“Primero, durante mucho tiempo los trabajadores no tienen ingreso, y segundo, se genera un gasto excesivo para los gobiernos al prolongarse los juicios”, puntualizó, recordando que en su etapa como senador presentó una iniciativa para agilizar los trámites de estos conflictos.
Finalmente, Menchaca hizo un llamado a los presidentes municipales a atender de inmediato los casos pendientes y buscar alternativas legales y financieras que eviten mayores daños a las administraciones y a la ciudadanía.